GANÓ MARCELEÑO EN DISPUTA POR BOLSA DE 30 MDP DE COMUNICACIÓN DEL CONGRESO
San Luis Al Instante.- Luego de una dura pugna entre grupos de poder y comunicadores por ganar la posición de Comunicación Social del Congreso del Estado, finalmente fue Eduardo Marceleño Alonso quien ha sido designado por diputados de la LXII Legislatura como jefe de esa oficina.
Debido a que el presupuesto de Comunicación Social del Congreso del Estado es de unos 30 millones de pesos, bolsa que es administrada contentillo del jefe de la oficina y de algunos diputados, debido a lo cual se han enriquecido anteriores titulares de ese despacho y dueños de medios, esa posición concentró la codicia de grupos de poder y comunicadores.
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De acuerdo a fuentes informadas, Marceleño Alonso llegó al cargo por negociaciones entre las bancadas del PRI, coaligado con otros partidos, y de Juntos Haremos Historia, que integran diputados de Morena, PT y PES. Marceleño Alonso representa a ambas fracciones, porque fue militante priista y en el presente participó en la campaña electoral del candidato de Morena a la presidencia de esta Capital potosina, Leonel Serrato Sánchez.
Desde sus días como universitario, Marceleño Alonso forma parte del grupo político Bronce y más concretamente de la fracción comandada por Enrique Galindo Ceballos, con quien trabajó cuando éste se desempeñó como comisario de la Policía Federal.
Se le ha ligado a la propiedad del periódico digital e impreso La Orquesta, hacia donde habría desviado importantes cantidades de dinero del presupuesto de la Policía Federal. Sin embargo, dicha versión ha sido desmentida por el director de ese medio, Jorge Saldaña, quien fue subordinado de Marceleño cuando éste se desempeñó en forma fugaz como Coordinador de Comunicación Social del gobernador Fernando Toranzo Fernández.
También ha servido a otros políticos, como Amado Vega Robledo y Juan José Rodríguez Medina, quien lo mismo es periodista que agente de Gobernación.
Su desempeño como jefe de la Oficina de Comunicación Social del Congreso del Estado será vigilada con lupa por organismos de la sociedad civil, como Ciudadanos Observando y el Frente Ciudadano Anticorrupción.
Ello debido a que la operación de esa oficina ha formado parte de las estrategias de los diputados para corromper a empresarios de medios y a periodistas, a fin de evitar que la ciudadanía tenga versiones veraces de lo que sucede con el trabajo parlamentario, sobre todo con la aprobación de cuentas públicas y la administración de su presupuesto.