COMO FARAÓN, GALLARDO CARDONA ES UNGIDO COMO GOBERNADOR DEL ESTADO DE SLP
San Luis Al Instante.- Como un anuncio de lo que serán los próximos seis años del gobierno que padecerá San Luis Potosí, Ricardo Gallardo Cardona tomó posesión del cargo de Jefe del Ejecutivo en una ceremonia faraónica, celebrada a mediodía de este domingo 26 de septiembre en la Plaza de los Fundadores de esta Capital.Dan a conocer a integrantes del Gabinete del Gobierno de Ricardo Gallardo
Gallardo Cardona escribe el inicio de una leyenda y será motivo de corridos norteños: Pasó de ser un criminal perseguido por el Estado que estuvo detenido en dos penales federales de alta seguridad a ser Gobernador del Estado.
Hace seis años, el Gobierno de la República, encabezado entonces por el Presidente Enrique Peña Nieto, lo detuvo a poco tiempo de solicitar licencia al cargo de Presidente Municipal de Soledad, acusado de delincuencia organizada con el propósito de saquear millonarios recursos de ese ayuntamiento.
Sin embargo, un año después fue liberado en forma generosa por el propio Gobierno Federal. Según versiones, con esa acción Gallardo Cardona fue impedido para contender como candidato del PRD a Gobernador del Estado, como opositor al candidato del PRI, Juan Manuel Carreras López.
En negociaciones secretas con el entonces titular de la Secretaría de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, se presionó a Ricardo Gallardo Juárez, padre de Gallardo Cardona, a movilizar dinero y votantes a favor del candidato priista, a cambio de la liberación de su hijo.
Investiga UIF saqueo de Gallardo a Interapas por 152.6 mdp, a través de Axioma
Tres años después Gallardo Cardona pudo convertirse en Diputado Federal por el PRD y encabezó el éxodo de un grupo de legisladores de ese partido hacia el Verde, a fin de apoyar las iniciativas de la Cuarta Transformación y del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Culpables ahora de su encumbramiento como Gobernador del Estado de San Luis Potosí son el ahora ex Gobernador Juan Manuel Carreras López y el Presidente López Obrador. Aquél por congelar las fundadas acusaciones de saqueo de recursos publicos, tanto en su contra, como hacia su padre; y éste por ordenar al Fiscal Alejandro Gertz Manero guardar el expediente presentado por la Unidad de Inteligencia Financera por delincuencia organizada contra el ahora Gobernador del Estado.
En su discurso de toma de posesión, Gallardo Cardona denunció haber recibido una "herencia maldita" de irregularidades y una deuda de 20 mil millones de pesos en pasivos, detectadas apenas en el proceso de entrega-recepción. Sin embargo, suavizó su discurso y dijo que "no buscará vengarse con nadie". Quizas lo dijo agradecido con quien nada hizo por castigar los impresionantes delitos cometidos por él y por su padre, que los han convertido en dos de los más grandes multimillonarios de San Luis Potosí, a pesar de un pasado de penurias. O como diría López Obrador: "Amor con amor se paga".
También acusó que 1 mil 700 millones de pesos fueron "saqueados" de la Secretaría de Salud de Gobierno del Estado y que la administración recién concluida adquirió medicinas apócrifas contra el cáncer y se detectaron 40 toneladas de medicamentos caducados.
Ya en éxtasis por las desbordantes y exageradas manifestaciones de halagos, el joven Gallardo Cardona anunció que en los próximos seis años habrá "abundancia", debido a las medidas de austeridad y orden financiero que tomará desde hoy.
Sin embargo, su discurso contrastó con la majestuosa ceremonia de unción en Plaza de los Fundadores. Una gigantesca estructura, armada apresuradamente, y un impresionante equipo de sonido, dispuestos ambos para ese evento, así como una costosa readecuación de espacios en el Centro de Convenciones, en donde despachará, anuncian un gobierno irracional y dilapidador.
La ineficiencia y corrupción de la naciente administración también se presagian para otros seis años más en San Luis Potosí. No sólo por el paso del gang Gallardo por las instituciones públicas, sino por la composición del gabinete.
De los nombramientos del Gobernador Gallardo Cardona destaca el caso de Rafael Aguilar Fuentes, una persona sin estudios profesionales y de oficio herrero, designado como Director del Archivo Histórico del Estado.
Ese sólo acto le mereció una tormenta de críticas al nuevo Jefe del Ejecutivo y ocasionó sentimientos de decepción. Lo mostró como un ignorante de la importancia del acervo histórico potosino y exhibió su desprecio por decenas de profesionistas y expertos en el campo, egresados de universidades.
Así fueron las primeras horas del nuevo Eminentísmo de San Luis Potosí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario