Frente a asesinato racista y de odio de potosinos en NL, Carreras guarda silencio

FRENTE A ASESINATO RACISTA Y DE ODIO DE POTOSINOS EN NL, CARRERAS GUARDA SILENCIO

Gráfica de Huaxteca Online.-

San Luis Al Instante.- Policías de la Fuerza Civil de Nuevo León asesinaron por cuestiones de racismo y odio a dos miembros de la etnia tenek de San Luis Potosí e hirieron a otros dos, quienes trabajaban como albañiles en una obra en construcción en la colonia Los Cristales, perteneciente a la ciudad de Monterrey, este sábado 26 de septiembre.

A pesar de que ya han transcurrido casi siete días de esos crímenes racistas y de odio, cometidos por agentes de Fuerza Civil de Nuevo León, hasta el momento el gobernador de San Luis Potosí, Juan Carreras, no ha emitido un comentario ni una nota de protesta a su homólogo de aquella entidad, Jaime Rodríguez Calderón.

Las personas asesinadas fueron Gregorio Santiago Margarito y Claudio Reyes, originarios del municipio potosino de Aquismón, quienes migraron a Monterrey junto a otras personas de ese lugar en busca de mejores oportunidades vida. Además, los hermanos Venancio y Jaime Santiago continúan delicados en el Hospital Universitario de la ciudad de Monterrey.

Los potosinos fueron acribillados a quemarropa por policías de la Fuerza Civil, cuando realizaban una reunión en la obra que realizaban. Al sitio llegaron los agentes, quienes maltrataron a los albañiles por su oficio y su condición. En respuesta a la defensa que hacían de sí estas personas y oponerse al arresto, uno o varios policías les dispararon a mansalva, matando a dos e hiriendo a otros dos.

Los cuerpos fueron trasladados a Aquismón, en donde fueron sepultados el martes 29 de octubre. 

Gregorio, de 20 años, se sostenía como guía de turistas en el Sótano de las Golondrinas. Perdió su fuente de ingresos, al cerrar los parajes a causa de la pandemia por Covid-19. Para sostener a su esposa e hija de un año y medio migró a Monterrey, en compañía de sus hermanos y de otros conocidos, para emplearse como albañil.

Gregorio y Claudio murieron de manera instantánea, al ser acribillados a mansalva por los policías al mando de Jaime Rodríguez Calderón, gobernador de Nuevo León. Claudio, de 41 años, deja en la orfandad a una niña de tres años y a otros cuatro más grandes. Gregorio a una niña de solo un año y medio. Los heridos fueron Jaime, Venancio y otro trabajador de nombre Felipe Martínez Martínez, quien presentaba golpes en la cara. Los dos hermanos se encuentran aún internados, uno de ellos grave.

La organización Zihuame Mochilla A. C., que apoya a comunidades indígenas que sufren actos de discriminación en Nuevo León, y otras asociaciones civiles han considerado estos crímenes como crímenes raciales y de odio, pues los policías de la Fuerza Civil de Nuevo León de seguro hubieran tenido otro procedimiento si se hubiesen enfrentado a personas de piel blanca y de otra condición económica.

A pesar de que estos homicidios han ocasionado un tremendo impacto en la sociedad mexicana, el gobernador de San Luis Potosí, Juan Carreras, ha guardado distancia y silencio. Hasta el momento no ha emitido alguna nota de queja y de exigencia de justicia a su homólogo Jaime Rodríguez Calderón (a) "El Bronco".