OTRO SACERDOTE POTOSINO HUNDIDO EN ESCÁNDALO DE ABUSOS SEXUALES Y DE DINERO
A través de un escrito pegado a las puertas de la parroquia de Nuestra Señora de la Anunciación, ubicada en la colonia El Paseo de esta Capital potosina y dirigida a la opinión pública, feligreses denuncian que el sacerdote encargado de ese centro religioso se conduce como "un mercader".
Desde hace más de cinco años, afirman, han padecido abusos, desatenciones y escándalos del párroco Margarito Sánchez. "Y aunque dicha situación ya es conocida por el arzobispo (Jesús Carlos Cabrero Romero), ya que algunas personas le han expuesto en varias ocasiones el mal desempeño de este sacerdote, el cual se comporta más como un empresario religioso que sólo está ávido de dinero, que como un pastor que escuche y atienda sus ovejas, no se ha hecho nada", mencionan,
Al mismo tiempo, denuncian que el Vicario del Arzobispado, Benjamín Moreno Aguirre, protege al sacerdote Sánchez. “Es crítico de los homosexuales hacia afuera, pero protector de los de adentro”, señalan los feligreses.
Y agregan: "Lo que realmente le importa al sacerdote Margarito es la familia que está manteniendo y tiene enquistada en la casa parroquial, ya que al buscarlo para un servicio siempre les dan el pretexto de que se está bañando o está dormido".
Además denuncian que una señora de nombre Vicky Escalante, quien se dice su secretaria particular, es cómplice de las fechorías del padre Margarito, desde Cáritas. “Es una oportunista que está solamente sacando dinero”, afirman.
Igualmente aseguran que "el padre Margarito se hace acompañar de jovencitos” y señalaron el caso de un joven hondureño, quien acusó al señalado sacerdote ante varias familias de haber abusado de él. También lo acusan de “alcohólico y fiestero”.
Ante estas acusaciones, el arzobispo Jesús Carlos Cabrero Romero admitió tener conocimiento de las mismas y aseguró que no se permitirán estos actos que afectan a la Iglesia Católica.
"No solo soy responsable de los sacerdotes, sino de todo el pueblo, y tengo que responder por ellos, tengo que cuidar de ellos; y sobre todo que sean respetados y escuchados. Hemos llegado ya con él a un acuerdo. Vamos a tratar de hacer las cosas bien. Sólo estamos esperando que pase estos días y ya nos tocará platicar”, dijo el jefe de la arquidiócesis potosina.
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